miércoles, 31 de diciembre de 2008

Los escenarios de nuestras vivencias eróticas















Desde que empezamos a sentir el cosquilleo del misterio en la adolescencia, y comenzamos nuestro recorrido por la sexualidad, los escenarios son especialmente importantes. Casi nadie olvida su primer beso, y es en parte por que el sitio donde ocurrió, le da muchos matices que ahora evocamos con placer.

Cuando la sexualidad es madura, el escenario tiene otros significados.

Aunque se suele entender por fetichismo el gusto por algún objeto, desde mi punto de vista el lugar donde ocurren nuestras fantasías, sueños o relaciones reales, es otra forma de fetichismo. Algunas personas dan mucha importancia al lugar, haciendo que el deseo casi dependa en gran parte de ese factor, otros no le dan casi importancia...

Quizá una de las razones por la que tanto nos gusta viajar es por que cambiamos de escenario, y esto invita a la desinhibición, y aumenta el deseo de la exploración sensitiva.

¿Hay lugares especiales en vuestra biografía sexual?